En febrero de 2013 fue parte del equipo que derrotó a Suecia por 3 a 2 y asistió a Sergio Agüero en el segundo gol argentino. Son verticales y la parte roja tiene un ligero degradado. El partido llegó a los tiempos extra con un marcador sin goles y luego a los penales. Durante los días previos a la final se especuló que Ángel podía llegar a recuperarse a tiempo para el último partido pero el día previo se resintió de su lesión y no pudo jugarlo.